PALABRAS

REFUGIO EN DIOS

Tiene todo lo que necesitas, pruébalo y ve si quieres

30/11/2020

Por: Apóstol Valdemiro Santiago

Demuestra y ve que el Señor es bueno, dice el Salmo 34: 8. Luego, en el mismo capítulo, leemos que el hombre que se refugia en Dios es bendito. Hay momentos en nuestra vida de los que realmente queremos huir, escondernos y el que se esconde en Dios es feliz en su elección.

No se refugiará en un lugar peligroso mientras huye, sino en un lugar seguro. Durante una tormenta, todos buscamos un rincón cubierto, y cuanto mejor cubierto, mejor refugio en el que nos esconderemos.

Son personas desesperadas que buscan refugio, las que necesitan huir o morir o sufrir. Todos, en algún momento, ya se han escapado de algo. Dios no aconseja no huir, pero sí recomienda que huyamos y nos refugiemos con Él. Nos refugiamos en Dios a través del grito, las súplicas, las lágrimas, la alabanza. Los que se refugian en Dios no se sienten frustrados. Solo serás feliz si te refugias en Dios, si dependes de Él, derramas tu corazón ante Él, te arrojas en Sus brazos, oras constantemente. Los hombres fracasan. Nuestros amigos nos decepcionaron y nosotros también decepcionamos a mucha gente. Es la naturaleza humana fallar, pero el refugio de Dios está seguro, garantizado. Sólo hay una salida para todos, refugiarse en Dios, porque Él es bueno. Te aseguro que dejaré esta tierra y lo que te digo no fallará, siempre puedes contar con Dios, porque fue y es así y, mientras Él lo permita, será así. En Isaías, se dice que el Señor está cerca de aquellos que lo invocan y mientras lo invocamos, Él estará cerca. Somos los santos de Dios. Santo no es perfecto, pero a la luz de la Biblia, los santos son aquellos a quienes Dios separó a través del sacrificio de Jesús. Somos santos pecadores, porque una vez que somos santos, seguimos siendo santos, así como un águila entre cerdos sigue siendo un águila, aunque se llena de barro. La recomendación es que tengamos temor de Dios, porque no nos falta nada. Puedes arrodillarte ante Dios y decirle lo que te falta. En este gran refugio que es Dios, hay todo lo que podríamos necesitar. A través del salmista, dice: haz la prueba y verás. Todo lo que sientes que falta en tu vida, Dios te lo provee.