PALABRAS

Celebra tu victoria

Poner una mesa es una celebración, porque Dios ya te ha dado la victoria, no pienses que ya has perdido tu lucha.

07/08/2019

Por: Obispo Amaury

Cuando tienes a Dios el Todopoderoso, ya cantas victoria con anticipación. En la Biblia le dice que celebre la victoria antes de tiempo, porque Dios es todopoderoso y siempre le dará la victoria. “Prepara una mesa para mí en presencia de mis adversarios, unge mi cabeza con aceite; mi copa se desborda ", Salmo 23: 5

La adversidad es todo lo que le ha estado preocupando, como la deuda, la amenaza, la situación, el desempleo, el hambre, la crisis, la advertencia de corte de cuenta, el diagnóstico y todos los informes desalentadores.

Poner una mesa es una celebración, porque Dios ya te ha dado la victoria, no pienses que ya has perdido tu lucha. No te rindas, porque ya eres un ganador. Y cuando preparas una celebración, en este caso una mesa, antes de la batalla significa que confías en el Señor y tu fe es muy grande. "Ahora la fe es la seguridad de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve", Hebreos 11: 1. La fe es cuando tienes la convicción de que el Señor tiene el control de todas las cosas y está cuidando lo mejor para tu vida. Dios hace lo imposible, hace lo extraordinario y lo sobrenatural. Haz lo que hizo David, cree fielmente en el Señor Jesús, porque Él puede sacarte de lo peor. Pero asegúrese de preparar la celebración, porque el Dios que hace lo imposible le dará la victoria por todo lo que le da sueño. A todos tus enemigos, no solo a las personas, sino a los enemigos les gusta la enfermedad y esas cosas, todo lo que tienes que enfrentar está bajo el poder y la Palabra de Dios en tu vida, y puedes celebrar el sí con anticipación, porque tu fe Es mucho más grande que todo eso. Tienes derecho a celebrar porque es una promesa del Señor para tu vida. Cuando los discípulos estaban desanimados, inseguros, Dios les dijo que no temieran. Así que no temas, incluso si estás en problemas, con alguna adversidad que te aflige mucho. Simplemente no dejes que este problema te deprima. “Amados, no te sorprendas por el fuego ardiente que surge entre ti, diseñado para probarte, como si algo extraordinario te estuviera sucediendo; Por el contrario, regocíjate porque eres partícipe de los sufrimientos de Cristo, para que en la revelación de su gloria puedas regocijarte ”, 1 Pedro 4: 12-13. Mantenga su fe firme y fuerte y prepare un banquete cuando llegue su victoria. ¡Que Dios te bendiga!