PALABRAS

Él es nuestro refugio y nuestra fortaleza

Confía en el Señor Jesucristo así como David creyó, para que Él solucionara sus problemas

12/04/2019

Por: Apóstol Valdemiro Santiago

"En ti, oh Jehová, me refugio; no sea yo jamás avergonzado; líbrame por tu justicia. Me inclina los oídos, líbrame rápidamente; es mi castillo fuerte, ciudadela fortísima que me salve. Porque tú eres mi roca y mi fortaleza; por causa de tu nombre, tú me conducirás y me guiarás. "Salmos 31: 1-3

La oración fuerte, la oración que trae respuesta, es la que demuestra para Dios la grandeza de Él e insignificancia del hombre.

David oró diferentemente de la mayoría, pues cuando él le dijo a Dios para librarse de su justicia, es porque la justicia del Señor no es por merecimiento sino por la fe del hombre. Debemos confiar mucho en nuestro Señor Jesucristo. Nosotros somos vigilados por personas que esperan una derrota nuestra, pues ellos quieren burlarse y probar que nuestro Señor Jesús no existe. Pero Dios siempre prueba que Él es el Rey de los Reyes y Señor de los señores. Muchas personas han intentado en varias ocasiones derribar, humillarte, pero sé que nuestro Padre es nuestro refugio y nuestra fortaleza, basta con confiar en Él. "En tus manos, entrego mi espíritu; tú me has reído, Señor, Dios de la verdad. "Salmos 31: 5 Mientras nadie cree en tu potencial nadie le da el debido valor, sepa que no hay nadie en el mundo que haya confiado en Dios que haya sido avergonzado. Usted puede estar viviendo el peor día de su vida, pero si confiar en Dios, como David ha confiado, su problema tendrá la solución. Deja que Dios guíe tus caminos, pues sólo Él es tu refugio. ¡Que Dios bendiga su día!