PALABRAS

Guarde su fe

Sólo es posible conquistar los objetivos trazados cuando ignoramos lo que intenta robar nuestro foco

24/11/2018

Por: Obispo Amaury de Farias

Todos nacemos con un propósito y cuando lo descubrimos no podemos medir esfuerzos para cumplirlo. Persistir hasta el fin para alcanzar el objetivo de vida designado por Dios debe ser nuestro blanco cada mañana.

Desistir no es una opción cuando se vive por la fe.

El apóstol Pablo ignoró todo lo que trató de desviarlo del foco. Su afirmación en 2 Timoteo 4: 7 cuando sentía que se acercaban los últimos momentos después de días dolorosos de cárcel es una lección de ánimo y perseverancia: "Cometí el buen combate, cumplí la carrera, guardé la fe". No había disculpas o algo pendiente. Él fue intencional en todo lo que hizo y habla con convicción que había completado todo. Nuestra misión es el cielo. Estamos aquí como extranjeros para ser probados y, una vez aprobados, adquirir el pasaporte de la eternidad con Cristo. Todo el mundo nace con condiciones de ganar esa batalla, basta con recorrer pasos en la dirección correcta. Juan 14: 6 es el mejor GPS para trazar esta ruta: "Jesús le respondió: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí. Jesús es el camino que nos lleva hacia Dios. Y como toda carretera esa jornada no es un recorrido lineal, siempre recto. Habrá imperfecciones en la vía, transitaremos por agujeros, curvas, subidas y bajadas. Si mira, el único que puede sacarlo o hacerlo cumplir su propósito es usted mismo. Las fuerzas del mal luchan 24 horas para creer en lo contrario, debilitar nuestra esperanza y ceder a las embestidas de Satanás, dudando. Pero siempre habrá la posibilidad de seguir intentando. En algunos momentos, Dios nos hará esperar. Parar un poquito mientras la señal está roja. Esto no significa que la promesa no suceda. Es sólo un tiempo de perfeccionamiento. David fue ungido rey y no asumió ese puesto el mismo día. Se necesitaron varios años hasta que todo se alineó y apareció la luz verde para que viviera el tiempo tan esperado. La demora es sólo una prueba de fe. Dios quiere ver dónde está su corazón: en las circunstancias o en él? ¡No desista! Siga firme en su propósito y complete su carrera. ¡Dios bendiga su día!