PALABRAS

Dios hará que ocurra un terremoto en su vida

(…) Oraron y alabaron al Señor, y en aquel instante ocurrió un terremoto

13/01/2018

Por: Apostle Valdemiro Santiago

Abra su Biblia Sagrada en el libro de Proverbios 3.1: ‘Hijo mío, no te olvides de mi ley; guarda en tu corazón mis mandamientos. No fuimos hijos siempre, pero en un día especial, cada uno tuvo un encuentro con el Señor, y se tornó hijo, ese día especial, fue el gran día de la adopción. A veces nos sentimos firmes y fuertes, pero en otros momentos no, eso es normal. Grandes hombres que la Biblia Sagrada relata, pasaron por días así, incluso siendo hijos del Creador. Elías mató a cientos de hombres; pero tuvo miedo de aquella mujer. Moisés entró en el palacio para hablar con el rey, pero pidió que el Señor se lo llevara porque no tenia comida para darle al pueblo. Son fases mi querido, si usted está pasando por alguna situación y está con miedo, ore, entregue en la manos de Dios, porque Él es contigo.

Es normal que el cuerpo se debilite después de las batallas, de los problemas físicos y de las luchas espirituales; mas nuestro Dios es quien nos da los recursos para continuar. Permanezca firme mi hermano. Cada uno en la vida tiene una receta para el éxito, precisamos seguirla, pero la receta es individual; no intente agarrar la receta del amigo, porque no es para usted. Mas, el ingrediente principal, que está en todas la recetas es : guardar en el corazón los mandamientos de Dios.

Sepa que la oración toca el corazón de Dios. Ezequías estaba enfermo, casi al punto de morir; pero él oró y le dijo al Señor: “«Señor, recuerda por favor que me he conducido ante ti con verdad y con un corazón sincero, y que siempre he hecho lo que te agrada y apruebas.» Isaías 38:3 Entonces el Señor le concedió 15 años más de vida. Somos hijos queridos del Dios altísimo, y precisamos entender el poder de la oración, y es por medio de ella que Él actúa en nuestras vidas Guarde los mandamientos del Señor, ore y siga las ordenanzas del Padre. Paulo y Silas, estaban en la prisión, pero no se desanimaron, en vez de eso, “A la medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, mientras los presos los escuchaban”, Hechos 16.25 Cuando usted ora, coloca el problema en las manos de Dios. Fue eso que Paulo y Silas hicieron, en vez de reclamar por estar presos o de intentar salir por sus propias fuerzas, oraron y alabaron al Señor, y en ese instante ocurrió el terremoto. Así como ellos confiaron de todo corazón en Dios, confíe también mi querido, porque en el momento cierto, ocurrirá un terremoto en su vida, y aquel problema caerá por tierra. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus sendas. Proverbios 3.6 . Independiente del local dónde se encuentre, reconozca que Dios es en la vida .Paulo y Silas estaban en la prisión, pero reconocieron que el Dios vivo era el Señor de sus vidas. En un camino, exite partes con paisajes impactantes, pero también tiene partes con escenas horribles, sin embargo, en todas partes del camino, usted necesita confiar y reconocer al Señor. ¡Guarde los mandamientos, ore y reconozca quién es Dios en su vida, porque Él vendrá y hará un terremoto en su vida!