PALABRAS

¿Va a quedarse de qué lado?

A través de Él somos más que vencedores

20/11/2017

Por: Pastor Hiago Pereira

En 1 Corintios, 2.14 dice: “Pero el hombre natural no acepta las cosas que son del Espíritu de Dios, porque le son locura; y no las puede comprender, porque se han de discernir espiritualmente. Existen dos tipos de personas, una que vive según la carne y la otra que vive según el Espíritu Santo la conduce. La persona que vive según la carne se queja de las instrucciones que el Señor le da y no acepta cuando el líder espiritual lo corrige, no consigue ver los cambios positivos en su vida, y cada día que pasa se hunde más. La persona que vive en el espíritu tiene la sensibilidad de sentir la presencia de Dios, escucha y practica todo aquello que vive dentro de la iglesia, busca la ayuda del líder espiritual, y ora sin cesar. Si usted se encuadra en la opción de la persona que vive en la carne, pare ahora, arrodíllese, y pida perdón al Señor, comience a obedecer todas las instrucciones que el Padre le da, siga en el camino que Él le preparó, entienda que los planes de Dios son mayores y mejores que los suyos. Si usted se encuadra en la opción de persona espiritual, continúe así mi hermano, firme en la pelea, y si usted está pasando por algún problema, deje su corazón en paz, porque Dios está contigo, y después de grandes desiertos vienen grandes banquetes preparados por el Padre.

Viva por la fe y con fe, porque el Espíritu Santo vive dentro de usted, no se deje desanimar por situaciones que aparentemente son imposibles, porque Dios es mayor que todo y que todos, Él está a su lado.

Dios no precisa de nada ni de nadie para bendecirle, porque Él es el todopoderoso, Él le da instrucciones para un final feliz, apenas obedezca, porque el resto Él lo hace. Usted escoge de que lado quiere estar, ¿quiere continuar siguiendo su carne y tratando de actuar por sus propias fuerzas? ¿O quiere quedarse del lado espiritual, siguiendo y obedeciendo aquello que el Señor le instruye?¿ Quiere una sugerencia ? Venga para el lado de Dios, porque por medio de Él somos más que vencedores.