PALABRAS

La bondad de Dios y la maldad del impío

El corazón del justo tiene que vigilar y temerle a Dios.

24/04/2017

Por: Obispo Jorge Pinheiro

La materia de: Victor Correa

En el Salmo 36, tenemos en el titulo dos cosas diferentes, la maldad del impío y la bondad del Señor. En el pensamiento del impío, hay una voz que lo instiga a transgredir la ley de Dios, una voz que viene del diablo, de los demonios que atormentan su vida . Como son los espíritus ,ellos se aproximan principalmente a aquellos que están lejos de Dios.

Para el diablo, aproximarse a los que están cerca de Dios es muy difícil, no consigue alcanzarlos, ni tener influencia sobre los que están con Dios, pero el diablo de todas formas intenta soplar pensamientos malignos y sugerir cosas malas. Satanás llegó a incitar a David, hombre de Dios, a establecer sentido común, por ejemplo. Algo muy malo que causó una maldición y una plaga sobre Israel, que mató a muchas personas.

El diablo sugiere muchas cosas , cabe a mí y a usted no dar oídos a él. El perverso es perverso porque la voz de transgresión está en su corazón, sin sentir temor a Dios al hacer el mal. Él actúa mal y no piensa en las consecuencias, no piensa en Dios, no se importa con el prójimo. Aquél que es fiel a Dios piensa en las consecuencias y le teme a Dios, por lo tanto , no lo hace. Cuando hacemos mal, el diablo sugiere que nadie nunca lo va a saber, que podemos hacerlo que todo saldrá bien. Todo lo que comienza mal, termina mal. La persona que se deja lisonjear por el mal y se sumerge de cabeza será avergonzada, tendrá problemas. Lo que vemos hoy es la banalización del pecado. Prostitución y bebida como algo común. Como si mentir y pecar fuera común. Una de las artimañas del diablo es “ el comportamiento social” , de intentar resolver todo “a su manera”. Por eso el mundo está como está. Iglesia no ceda. Imagine que su vida es una canoa que el error es un agujero. Cuantos más errores cometa , más cerca estará de hundirse. Cada mentira, cada error, cada habladuría, cada robo, son agujeros en su barco. Cuando va a dormir, el impío elabora pensamientos perversos y medios de transgredir, de quebrar las reglas y perjudicar a las personas, de vengarse de todo aquél que hace algo contra él. El diablo, al ver eso, trabaja en la mente de las personas en todo momento, para que ésta trame el mal. Si usted sabe que esa persona o alguien es malo, no ande con ella, o usted estará sujeto al mismo mal. Cuando ensuciamos nuestra ropa, la lavamos para que la mancha se caiga, se despegue , se purifique. Existen personas que, sin embargo, no quieren despegarse del mal. Están con ropas manchadas y continúan como si nada hubiera ocurrido. Al contrario de todo esto, Dios es bueno y Su bondad llega hasta los suyos .Él jamás te dejará solo, cuando vengan las adversidades, Él no lo abandonará, Él es fiel e insiste en recordarte siempre eso. Quien preserva nuestras vidas es Él, nuestras vidas están en Sus manos y Él puede quitarla cuando quiera, sin que nada podamos hacer. Los días que hemos vivido no son días buenos, por eso necesitamos ser prudentes. Aunque los días sean malos, nuestras vidas están en las manos de Él, por lo tanto, vale la pena agradar a Dios. Por mucho menos, algunos intentan agradar a sus jefes. Los beneficios del jefe son temporales , pero los que Dios da son para toda la vida, entonces vale la pena .Él puede todas las cosas a nuestro favor, como dice le Salmo 37, tenemos que agradar al Señor para que Él satisfaga los deseos de nuestros corazones. Nosotros nos satisfacemos de la abundancia que Dios nos entrega en Su Casa, en la iglesia. Dios nos entrega riquezas y bendice nuestros pies, nuestras manos. Cuando aplaudimos a un astro, el placer es momentáneo , mientras que, cuando aplaudimos a Dios, abrimos puertas para nuestras vidas. La luz de la vida es la luz de Dios. Para que podamos ver en la oscuridad, necesitamos de luz y nuestra vida espiritual no es diferente, no podemos estar en la oscuridad, sin dirección, sujetos a tropezar, a caer, a ser atacados y morir, sin tan siquiera saber de donde vino el mal. Si usted quiere, a partir de hoy, usted no será más engañado, Dios le revelará todo, usted no caminará más en la oscuridad .Esa cosas negativas son para los hijos del diablo, pues aquellos que le sirven a Dios no se equivocan. Dios continuará siendo bueno para todos aquellos que Lo conocen. Precisamos pensar cosas buenas, vigilar nuestros pensamientos y no dejar nuestra mente ociosa, ocúpela con cosas buenas. Una de ellas , si me permite, es ir a la iglesia. Usted precisa seleccionar bien las cosas que van para su corazón. La única manera de aquellos que practican el mal levantarse es la mano de Dios. Sin ella, nadie en el pecado conseguirá levantarse. Existen situaciones en que la persona no consigue salir más, solamente Dios puede resolver eso. Para nosotros, que ya hemos pasado por eso, lo mejor es no caer. Dios puede levantarnos, pero andar recto delante de Dios, en la luz, es mejor y usted no caerá.