MILAGROS

Dios es el dueño de la vida

“Nosotras dos morimos, pero fue Dios quien nos salvó”

07/10/2017

“Si no hubiera sido Jesús, mi hija y yo estaríamos muertas”, declara Elisangela da Silva Carvalho, 40 años, residente de Sao José dos Campo, Sao Paulo. “Sufrí una hemorragia; tuve complicaciones en el parto por causa de eso, de manera que el equipo medico responsable le dijo a mi esposo que solamente un milagro nos salvaría. Gracias a Dios el milagro existe y hoy estamos aquí”.

Elisangela dice que su hija estaba muerta.” Durante el parto sentí que las fuerzas acababan y clamé por el socorro de Jesús. Los médicos retiraron a mi hija en la cirugía y yo no escuchaba su llanto, comencé a preguntar por ella, a llorar y percibí en el semblante de las enfermeras que mi bebé estaba muerta. Ellos comenzaron a intentar hablar conmigo, a calmarme, cuando el llanto comenzó. En ese instante, ellos comenzaron a sonreír y animarse, sorprendidos y supe que estaba viva por un milagro divino”.

Con la bebé en los brazos, ella concluyó. “Cuando me desperté, después del descanso pos parto, los médicos me buscaron y me dijeron que nosotras éramos un milagro . Según ellos, la sangre que perdí, las fuerzas que redujeron la presión arterial y las pulsaciones, les hizo pensar que moriríamos, pero Dios es quien nos salvó y ellos, los mismos médicos, reconocieron que nuestra vida, la mía y la de mi hija, era un milagro, par ala gloria de Jesús”.