MILAGROS

Dios está contigo

“Glorifico a Dios por las puertas abiertas para mi familia y para mí’

23/04/2017

La materia de: Victor Correa

“Yo sufría con un problema en los labios, se caían pedazos de mi boca debido a las heridas”, cuenta Gabriel Martins Batista, de 18 años, sobre como era su salud antes.” Los médicos sacaban pedazos de la boca para hacer exámenes e intentar descubrir que era. Comenzó con una burbuja enorme debajo de mi lengua que reventó y salió mucha sangre. Ardía, me picaba y no conseguía comer prácticamente”.

Durante el periodo que Gabriel pasó por esa dificultad, su familia también sufría financieramente. Mis padres me intentaban ayudar, pero no tenia condiciones, nosotros vivíamos en la casa de los otros . En un cuarto arriba de un bar y casi pasábamos hambre. Pagar un tratamiento era imposible, nuestra situación era terrible. Yo tenia más o menos 10 años y ni conseguía ir para la escuela, porque mi boca apestaba, las personas preguntaban y yo no sabia que decirles. Mi peso era muy bajo, mi salud no era de las mejores”.

La historia de Gabriel y su familia cambió cuando Jesús entró en la causa. “Conocimos a Jesús por la TV, a través del trabajo de la Iglesia Mundial del Poder de Dios. Vinimos hasta la iglesia y, en esa época, el obispo Jorge Pinheiro dejó una palabra de cura. De aquel día en adelante, el dolor fue desapareciendo y nuestra situación financiera comenzó a cambiar. En la santa cena del mismo mes, yo comí aunque ardía y, al día siguiente, comencé a comer una parrillada, casi sin dolor. Después de eso, mi boca nunca más dolió y la enfermedad desapareció, las heridas cicatrizaron por el poder de Dios”. Gabriel concluyó su testimonio contando la obra completamente. ”Dios también entró con providencia en la vida financiera y hoy, tenemos dos casas y estoy construyendo otra más. Tenemos , en total , tres carros y mañana haré una entrevista en un hospital, glorifico a Dios por las puertas abiertas para mí y para mi familia”