Caerán á tu lado mil, y diez mil á tu diestra: pero á ti no llegará.
Libramiento de Dios para fieles contra inundación que afecta toda la región.
02/10/2016
La materia de: Victor Correa
Acompañando el trabajo de la iglesia mundial del poder de Dios por la internet, Marlene Oliveira Comeaux, de 48 años, vive en Luisiana en los Estados unidos, recibió su victoria, protegida por las manos de Dios. “Una inundación fuerte después de una tormenta afecto todo el estado y también muchas ciudades vecinas, con inundación de daños gigantesco para todos y, pierdas de vidas y bienes, Mi esposo y yo tenemos una empresa y, cuando las lluvias empezaron, vino una previsión de inundación y empezamos a clamar a Dios. Conocemos a la Iglesia Mundial del Poder de Dios por la internet, algunos años atrás, desde entonces, tenemos buscado y confiado en Jesucristo y en los milagros.”
Según Marlene, cuando empezó la inundación, todos tuvieron pierdas. “Nosotros perdemos cerca de un millón de dólares en reformas, pero glorificamos a Dios, pues nuestras perdidas fueron las mas pequeñas, cuando comparadas con lo que sucedió al nuestro rededor. Familias perdieron la vida y empresas enteras fueron ahogadas en aguas sucias de la inundación . Después que empezamos a orar, Dios guardo nuestra casa, al punto de que el agua en nuestro patio no llego en la rodilla, mientras que el nivel del agua de la inundación en los vecinos pasaba la altura del hombro de una persona de 1.80 metros aproximadamente . El milagro fue tan grande que muchas personas pasaban por la frente de nuestra casa y nos llamaban preguntando el porque del agua de la inundación no nos afecto y nosotros apenas decíamos: El motivo es la mano de Dios.
Los perjuicios, la empresaria concluí que “ mismo con las perdidas, lo que tuvimos fue mínimo. Las perdidas estimadas eran de cinco millones. Para algunos empresario y comerciantes de la región, negocios enteros fueron arruinados. Agradecemos mucho a Dios, porque nuestro negocio permaneció de pie y pudimos reabrir así que el agua bajo. Ninguna enfermedad o mal de la inundación toco nuestras vidas o a de nuestros empleados y todo el perjuicio financiero, Dios nos dio en doble, con prosperidad y puertas abiertas en las negociaciones que vieron después de la inundación, que pudimos proseguir apenas por que el Señor no guardo.
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